ISSN-L: 0798-1015 • eISSN: 2739-0071 (En línea) - Revista Espacios – Vol. 42, Nº 23, Año 2021
SÁNCHEZ, Pedro R. et al. «El proceso de formación investigativa del ingeniero industrial basado en
competencias»
1.2.2. La contradicción fundamental
El contexto socioprofesional está matizado por la ocurrencia de cambios de diversos tipos, considérense:
sociales, gnoseológicos, tecnológicos, metodológicos y praxiológicos, los que se manifiestan con mayor fuerza
en los sectores de la producción y/o los servicios.
Estos cambios en muchas ocasiones no llegan a conocerse o transferirse a las instituciones encargadas de la
formación de los profesionales, no se integran a los currículos de las carreras ni los modifican, o llegan a estos
con retardo en el tiempo, en un mundo donde la información y los conocimientos se vuelven obsoletos con
rapidez. Esto constituye una debilidad del proceso de formación y en muchas ocasiones provoca que estas
instituciones estén desactualizadas y, sin embargo, supongan estar ofreciendo una formación acorde con los
requerimientos del mundo laboral o al menos con una tendencia positiva a satisfacerlos.
El análisis realizado a la relación contradictoria entre las exigencias del contexto socioprofesional y la formación
investigativa, conjuntamente con los restantes elementos citados anteriormente, condujo a la necesidad de modelar la
formación de las competencias investigativas del ingeniero industrial desde la relación contradictoria en el plano
interno dada entre la interiorización de la cultura científico investigativa y el desempeño investigativo.
La cultura científico investigativa es la base del desempeño investigativo, el cual se corresponde con esta y está
directamente relacionado con la interiorización de los saberes asociados a la profesión que ha hecho el sujeto. Al mismo
tiempo el desempeño investigativo es la expresión en la praxis de la exteriorización de la cultura científico investigativa, es
lo objetivo, el lado práctico de esta.
Este desempeño investigativo cuando es idóneo genera nuevos saberes, que no se incorporan de manera inmediata a la
cultura (actualmente como resultado de la internación de las investigaciones en los procesos de producción existe una
tendencia a utilizar el conocimiento en los mismos lugares donde se produce), en muchas ocasiones esta demora no
depende de su validación como conocimiento que amerita su transmisión generacional, sino de que sea llevado a las aulas
universitarias, de que se actualice. Sin embargo, estos conocimientos van significando el desempeño y generan nuevas
exigencias que no son satisfechas por la cultura científico investigativa que lo originó, y hacen que el desempeño
investigativo no sea sostenible; aquí se da el momento crítico de la contradicción. Una vez asimilados estos nuevos saberes,
se enriquece la cultura científico investigativa, se pone a tono con las exigencias de desempeño y se supera la contradicción,
que pasa a un nuevo ciclo de desarrollo.
Esta cultura científico investigativa es portadora de los elementos esenciales inherentes a los contenidos de la profesión,
a los modos de actuar, a la regulación de la conducta. Todo lo relacionado con la investigación, a los componentes
fundamentales de los distintos procesos básicos, en general, porta toda una riqueza cultural de la que debe apropiarse
el sujeto interiorizándola y expresándola posteriormente en un desempeño investigativo idóneo, que es el causante
de la generación de cambios como los ya mencionados de tipo tecnológicos, gnoseológicos, etc., los que
modifican esa cultura interiorizada por el individuo, actualizándola y enriqueciéndola y esto trasciende a lo ya
establecido, negándolo.
No obstante, ambos se dan en unidad, en tanto la diversidad y unicidad de la cultura científico investigativa se preserva
mediante la interiorización, en el desarrollo que ha provocado en ella los cambios resultantes del desempeño
investigativo idóneo como contrario dialéctico de la interiorización de la diversidad y unicidad de la cultura científico
investigativa.
Las relaciones que se establecen en este proceso de formación investigativa basada en competencias entre el estudiante y el
profesor, el estudiante y otros estudiantes, el estudiante y los profesionales en ejercicio, el estudiante y otros elementos del
entorno socio afectivo y en general del entorno social de desarrollo, al efectuar las actividades investigativas y las de índole
académica y laboral, en la actividad y la comunicación, son interiorizadas y matizadas a través de interpretaciones,